Teniendo por objetivo romper el diseño típico de mangas ajustadas a la forma natural del brazo, las mangas dolman pretenden aumentar su volumen por medio de holanes, plisados o simplemente un corte que permita abombar la parte superior de la extremidad.
Su forma se ha definido como arquitectónica, y es posible aceptarla como viable para tendencias tanto retro como futuristas.
Una de sus desventajas es la de dotar el cuerpo femenino de una apariencia más robusta de la deseada, o hacer más complicado el acompañar el diseño con una segunda prenda (que se lleve encima, como una chaqueta, blazer o gabardina) o bolsos. En este sentido, la joyería de grandes dimensiones resultaría exagerada o de mal gusto, lo cual representa cierta limitación en cuanto a los complementos se refiere.
El diseño de la izquierda es un vestido princesa en colores crema y blanco con detalles muy pequeños en beige y café. El ángulo de su escote está unido por una tela de transparencia blanca. Es una creación de la firma Nina Ricci.
El segundo diseño de Gianfranco Ferré realza sobre la falda gris de tubo, una pieza que debe su forma en gran medida a dos rasgos: el faldón color blanco y el escote en forma e «v» angosta.
Foto: Vogue
