Hay bolsos que lucen una sola figura, de símbolos que representan toda una ideología o postura, imágenes en colage que reflejan creatividad y multiculturalidad, y otros cuyo elemento central (el que capta la atención en primera instancia) es una leyenda.
Independientemente del orden o desastre que haya dentro, lo que luzcas fuera de tu bolso o cartera dice mucho de tu forma de pensar y de tu actitud ante la vida. Sí. No es exageración, aunque parezca demasiado o seas de las que cree que las «envolturas» no corresponden forzosamente a lo interior.
Nuestras inclinaciones al comprar ropa y accesorios se gobiernan por nuestros gustos, y éstos a su vez obedecen generalmente a nuestra mentalidad y sentimientos.
Cuando se trata de un accesorio femenino como lo es el bolso, tiene un significado especial de mayor individualidad aun, ya que es un artículo que usaremos muy probablemente con mucha más frecuencia que una blusa, una chaqueta o un pantalón.
De cierta forma, es él quien protege dinero, maquillaje, pañuelos desechables, notas, llaves, y todo lo que portamos por imprescindible. Secreto o no, inconscientemente le conferimos la confianza de ser un pequeño representante de nuestra persona dentro de nuestro atuendo.
Este par de bolsos, por ejemplo, seguro te remiten a dos chicas de personalidad distinta, ¿o no?
Foto: lorimarsha, y Embelezzia
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