Sentirnos incapaces de seducir
La mayoría de las personas nacemos con un poder de seducción, que muchas veces algunos no se permiten desarrollar, según los psicoanalistas esto se debe a la presencia de miedos, vergüenza, y baja autoestima por parte de la mujer.
Siempre en nuestro mundo interno de imágenes, hay una imagen muy fuerte que es la que tenemos de nosotros mismos, y sobre nuestra propia persona, y esto es un verdadero reflejo de las opiniones que tienen las otras personas sobre nosotros, y a su vez es un producto de una elaboración propia que venimos trayendo desde la niñez, que influirá en nuestras actitudes y conductas durante toda la vida.
La autoestima sobre nosotros mismos, es mantener un buen concepto de lo que somos y una muy buena valoración propia, es por ello que para seducir debemos ser realistas y ser objetivos con nuestros defectos y virtudes, y sobre todo tener presente que nuestra vida transcurre y se va formando sobre fracasos y éxitos que debemos aceptar y asumir, para fortalecer la confianza en nosotras mismas, ya que esto es lo que nos proporcionará seguridad a la hora de tomar decisiones y enfrentarnos con esa persona que tanto deseamos y que muchas veces los miedos y fracasos anteriores nos llenan de vergüenza y no nos permite acercarnos a el.
