Recurrir a ingredientes caseros para cuidar y recuperar nuestra piel, no es algo que se haya puesto de moda en los últimos tiempos, aunque bien podríamos decir que muchas son las firmas que aprovechan las propiedades de los alimentos, como las frutas, la jalea real, el aceite de oliva, los frutos secos y otros para realizar sus cosméticos y así brindarnos las mejores fórmulas a la hora de cuidar nuestra piel.
Nosotras podemos hacer lo mismo en casa, y en pocos segundos con algunos ingredientes aprovechar sus propiedades para lucir y cuidar el aspecto de la piel. El mango es una fruta deliciosa, rica vitamina C, un poderoso antioxidante que combate los radicales libres y previene el envejecimiento prematuro, ideal por su contenido en vitaminas y minerales para recuperar pieles secas.
Te proponemos una mascarilla hidratante y exfoliante, que dedicando media hora al cuidado de la piel, puede darte resultados sorprendentes. Toma nota.
Necesitaremos: Un mango sin piel, una cucharada de azúcar y una cucharada de avena extra fina.
Para la preparación, procesaremos la pulpa del mango, y una vez que obtengamos una pasta homogénea agregaremos la cucharada de azúcar, volvemos a procesar, y agregamos la cucharada de avena extra fina. La pasta obtenida debe aplicarse cuidadosamente sobre las zonas a tratar o la piel del rostro, cuello y escote previamente limpia, con movimientos suaves y masajes ascendentes circulares, dejar actuar aproximadamente durante media hora. Luego removemos con agua tibia, y enjuagamos la piel.
Rápidamente sentiremos un gran alivio sobre la piel dañada, sintiendo una extrema suavidad sobre la misma. Recordamos que como cualquier producto casero, cuando se utilizan frutas, se debe utilizar en el momento de prepararlo, porque las mismas se oxidan rápidamente. Se puede utilizar esta mascarilla hidratante dos veces por semana para conseguir mejores resultados.
