A todos nos pasa que muchas veces conseguimos la persona indicada para que se haga cargo de nuestro hijo, pero por razones ajenas ésta muchas veces nos tiene que abandonar. Los niños se acostumbran a ciertas rutinas y los cambios repentinos no suelen ser de su agrado, lo más recomendable en el caso de cambiar de niñera es que esta se incorpore antes que la otra se retire se su vida cotidiana.
La partida de su nana, para un niño significa un cambio verdaderamente emocional, que no debemos pasar por alto, ya que puede ser la primera vez que tenga que decirle adiós a alguien que quiere mucho.
- Debemos intentar hablar con él , para que entienda que pronto vendrá otra persona que lo va cuidar y querer como ella, para que se vaya haciendo a la idea, y que esto no suceda repentinamente.
- Se le deben explicar correctamente los motivos de la partida de la nana, y en el caso de que comience el jardín, tratar de hacerle comprender que esta creciendo y que podrá encontrar mucha gente que lo quiera tanto como ella.
- De ser posible, la niñera debería explicarle que no se va porque ya no lo quiere, sino porque el tendrá otras actividades, y ella tendrá otro trabajo, esto es muy importante para que el niño no sienta culpa de su partida, o que se va porque se comporta indebidamente, y es mejor dejárselo claro.
- Sobre todo debemos dejar que el niño realice su momento emocional como corresponde, y respetar su tristeza expresando todas sus emociones, no retarlo, comprenderlo, y colaborar con esta dura partida de un ser que seguramente él quiere mucho. Seguramente entenderá que su niñera, podrá regresar a visitarlo o llamarlo por teléfono cada vez que pueda.
Foto: Gracias a b-may
