Como venimos dando pequeños consejitos, este es uno más a tener en cuenta, cuando queramos lucir nuestra piel humectada y completamente radiante, tersa y suave.
Para preparar esta mascarilla necesitaremos contar con los siguientes ingredientes:
3 cucharadas de jugo de hojas de lechuga; 3 cucharadas de miel, y una cucharadita de jugo de limón. Una vez que tenemos los ingredientes, debemos pasar a machacar las hojas de lechuga en un mortero hasta obtener las 3 cucharadas de jugo y a posterior, agregarle el jugo de limón para que no oxide, luego la mezclaremos con la miel y ya tendremos la mezcla para la máscara.
Debemos aplicarla cuidadosamente sobre el rostro, evitando el contorno de los ojos, y el de la boca, realizando pequeños masajes circulares y golpeteos para relajar los músculos de la cara. Una vez aplicada, debe permanecer en el rostro unos 20 a 25 minutos, para que todos los nutrientes que poseen tanto la lechuga como la miel y el limón penetren bien en los poros. Se retira con paño embebido en agua tibia, hasta quitar todos los restos, y luego se enjuaga con abundante agua.
Para finalizar podemos utilizar un tónico rehidratante a modo de spray, y nuestro rostro se verá, con una piel suave, luminosa y tersa.
Foto: manel
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