Seguramente habrás escuchado nombrar alguna vez el uso de la almohadilla fisiológica preventiva, y te preguntas para que sirve éste accesorio.
Como hemos hablado en alguna oportunidad, el cuidado de la cabeza del bebé sobre todo los primero años de vida es sumamente importante, ya que se hace necesario dedicarle algo de tiempo a revisar que la misma esté redondeada, para que no se deforme, porque los huesos de su cráneo son blandos y pueden hacer que su cabeza se achate si siempre está en la misma posición o duerme del mismo lado.
Para observar la cabeza de vuestro bebé debes hacerlo desde la coronilla hacia abajo, de esa forma contemplaremos todo su contorno, pudiendo observar si la nariz está bien situada y ambas orejitas se encuentran alineadas, luego debemos fijarnos que ambos lados sean simétricos, y si la parte superior del cráneo está redondeada. Las deformaciones cuando el niño tiene menos de 6 meses se puede corregir fácilmente por eso es necesario que si detectas alguna diferencia lo consultes con tu pediatra.
Las almohadillas fisiológicas preventivas, justamente sirven para que la cabeza del bebé no se deforme, y se desarrolle redonda hasta que sus huesos se endurezcan, la misma cumple la función de que la cabeza del bebé permanezca en forma correcta, sin presionar todo el peso de la misma sobre el colchón, ya que a veces muchos bebés deben permanecer en una sola posición por recomendaciones médicas un caso puntual, es cuando tiene problemas de reflujo, que debe estar semisentado y boca arriba para no devolver los alimentos que ingiere.
De todos modos, si tenemos la precaución de cambiar de lado al bebé, si no tiene inconvenientes y lo colocamos boca abajo cuando está despierto, las deformaciones se pueden evitar.
