Cuando los niños poseen presencia de ampollas es muy necesario extremar los cuidados y procedimientos, para evitar posibles infecciones.
- Nunca debes romper las ampollas, ya que ésto permitiría el acceso de gérmenes sobre la zona lastimada, ya sean superficiales o en la profundidad de la dermis, pueden agravar la situación y terminar en infecciones severas.
- Para retirar el líquido de las mismas, es necesario utilizar agua oxigenada, y luego cuidadosamente atravesarla con ayuda de una aguja esteril, unida a un hilo impregando de alcohol, pasándola por toda la superfice de la misma, ya que de ésta forma el hilo con alcohol, absorberá todo el líquido de la misma, ayudando a que se seque más rápidamente.
- Luego se debe cubrir la ampolla durante 2 o 3 días, para evitar la proliferación de gérmenes.
- Por otro lado para prevenir la formación de ampollas sobre la piel delicada de los más pequeños, sobre todo en los pies, es necesario que lleven siempre medias de algodón, colocarle buena cantidad de talco en sus calzados, y sobre todo, asegurarnos que el talle del mismo sea el correcto.
No dude en consultar con su pediatra de confianza, y antes de romper alguna ampolla, asegúrese que las mismas no son síntomas de alguna enfermedad como varicela o cualquier otra que se manifiesta de esa manera.
