Los Oxiuros son unos parásitos conocidos comúnmente como «Lombrices». Muchas madres creen que aparecen en el pequeño, porque no tiene ganas de comer, o por una mala alimentación, lo cierto es que no es así.
Las lombrices son unos pequeños parásitos en forma de hilo y de color blanco, que se contagian hacia el pequeño porque mantiene contacto con otras personas enfermas, y no salen porque se alimente poco, como se dice tradicionalmente. Lo que si es cierto que éstos parásitos pueden disminuir el apetito del niño.
Las lombrices viven en el intestino y salen a depositar sus huevos en el año durante la noche, lo que le producen al pequeño molestias y picazón, al rascarse los huevos quedan debajo de sus uñas y luego los puede esparcir por todo aquello que toca. Por eso es necesario consultar con el pediatra para que nos recomiende el tratamiento correcto para las lombrices. El mismo debe ser seguido por toda la familia inclusive por los padres, ya que los Oxiuros son extremadamente contagiosos, y donde hay una persona enferma, es común que se contagie toda la familia.
En el caso de haber una madre embarazada, con su hijo con lombrices, debe consultar de inmediato con su obstetra, ya que no puede tomar el mismo tratamiento que el pequeño.
