Aquí os dejamos tres prácticas recomendaciones para que puedas aliviar los malestares que provocan las varices, sobre todo en casos de retención de líquido o de piernas casadas.
Las varices son una enfermedad que afecta a las venas de las piernas. Es debido a diversos factores, que las venas se ensanchan, dilatan y se vuelven tortuosas. Esto provoca problemas de circulación sanguínea que pueden ser muy perjudiciales para la salud además de lo antiestético de las varices.
Una de cada diez personas padece de varices, siendo más frecuentes en las mujeres, sobre todo por efecto de los embarazos y las hormonas.
Remedios caseros
Compresas de vinagre: Las compresas de vinagre, actúan como antiinflamatorio y son muy beneficiosas para combatir arañitas y mala circulación, debe aplicarse unas compresas de vinagre y agua fría por las noches antes de acostarse y así reducir la tensión de sus piernas.
Arcilla con zumo de cebollas, para aplicarlo debe amasar arcilla medicinal con el zumo de una cebolla cruda, y aplicar por las noches al acostarse como si fuera una cataplasma, directamente sobre la piel, debe dejarlo actuar durante toda la noche. Una vez realizado esto al otro día deberá humedecer la piel con zumo de limón y realizar masajes suaves pero profundos hacia arriba y abajo con la mano.
Infusiones de Romero con miel y flores de sauco, son excelentes infusiones para ingerir dos o tres veces al día como para realizar cataplasmas sobre la zona afectada y colaborar con la circulación sanguínea de nuestras piernas.
Los estudios realizados demuestran que las personas con obesidad tienen un 50% más de posibilidades de desarrollar la aparición de varices que las personas normales y, además, los obesos portadores de varices tienen el riesgo de presentar complicaciones trombóticas posquirúrgicas.
Cómo prevenir la aparición de las varices
- Realizar actividad física periódicamente: Se recomienda evitar los ejercicios de alto impacto (saltar, correr, step, tennis, etc). Lo ideal es realizar bicicleta, natación, caminata y yoga 40 minutos al día.
- Llevar una dieta equilibrada: Con abundante líquido, frutas, verduras, hortalizas y cereales. También incluya todo tipo de lácteos, carnes blancas (pollo y pescado) y, dos veces por semana, carne roja. Disminuya el consumo de sal.
- Dormir en una buena posición: no apoyar una pierna sobre la otra, porque la presión lesiona el tejido subcutáneo, interrumpe la irrigación y la corriente nerviosa. También, puede ser muy útil dormir con los pies ligeramente levantados.
- Evitar fuentes de calor excesivo: una prologada exposición al sol, la calefacción a la altura de las piernas o por loza radiante, los baños muy calientes y la depilación con cera.
- Consulta temprana al flebólogo: aunque sólo tenga unas pequeñas venitas indoloras, no espere a que aparezcan las molestias y consulte a un especialista. Si la varicosis no se trata a tiempo, puede aparecer dolor y aumentar el número de venas afectadas.
- Inclina tu cama: Coloca cojines a los pies de tu cama para que duermas con las piernas levantadas, de manera que alivies las várices al momento de dormir.
Le recomendamos que en cualquier tratamiento que se inicie para combatir las varices que, siempre que pueda, ande descalzo sobre el suelo natural (tierra, arena) y que el calzado sea amplio, con suela fina y suave. No dude en consultar su medico.
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