Enseñarle a vestirse a un pequeño no es tarea fácil, pero al rededor de los 3 o 4 años, ya comienzan a tener cierta independencia y pueden realizarlo solos.
La mejor manera para que aprendan y se sientan motivados, es como en todos los aprendizajes que debemos brindarles, hacerlo mediante juegos, podemos inventar historias y hacer que se vaya colocando las prendas, y ayudarlo si nos lo solicita o vemos que tiene problemas, de esa forma poco a poco adoptará el hábito de vestirse solo y rápido antes de irse al cole.
También podemos crear alguna canción nombrando las prendas que se va colocando y vestirlo mientras nosotros también nos vestimos, no solamente reconocerá su ropa, sino que no tardará mucho en copiarnos nuestros movimientos y actitudes.
Para aquellos que son de carácter más competitivo y les gusta demostrar que son rápidos, se puede inventar algún juego donde midamos el tiempo que demora en vestirse e incentivarlo a que el día siguiente lo haga más rápido, podemos jugar a que algún amigo está haciendo lo mismo que él y si no se apura… él le ganará.
Otros juegos que se pueden usar al momento de vestirse es el de los bomberos, que se visten rápidamente para ir a apagar los incendios, el límite está en la imaginación, y sea cual fuere el juego, recordemos siempre que ellos aprenden más rápido con aquellas cosas que les resultan divertidas.