La cirrosis es una enfermedad hepática crónica que se caracteriza por la degeneración de las células del hígado, donde poco a poco las mismas van dejando de funcionar.
Desde la alimentación, podemos colaborar con ciertos procesos y ayudarnos para combatir esos síntomas.
- Las alcachofas, que contienen cinarina, son excelentes ya que esta sustancia protege el hígado, y se puede beber una vez al día una infusión de sus hojas.
- La menta piperita, es ideal para proteger y desinflamar el hígado ayudándolo a realizar sus funciones metabólicas, se puede preparar una infusión con una cucharada de la hierba seca por taza de agua hirviendo y tomar luego de las comidas.
- Otra hierba excelente es el té verde, ya que ejerce una protección antiviral sobre el hígado, ayudando a prevenir el cáncer de hígado y combatir la cirrosis. Se pueden beber tres tazas al día de su infusión.
- Un tratamiento muy beneficioso también es el zumo de zanahorias y el zumo de espinacas, debe mezclar 200 mililitros de zumo de espinacas con 300 mililitros de zumo de zanahorias, mezclar y beber a diario.
- También para aliviar el malestar hepático que provoca la cirrosis, puede aplicar una compresa fría o caliente sobre la zona del hígado que proporciona grandes alivios.
Foto: Gracias a ExperienceLA