El embarazo extrauterino o ectópico, es decir cuando el óvulo fecundado se implanta por fuera del útero, son descubiertos por lo general cuando la mujer comienza a presentar síntomas a las seis o siete semanas aproximadamente. En algunas ocasiones no existen síntomas previos y esta complicación es descubierta recién cuando se realiza la ecografía del primer trimestre.
Con el objetivo de prevenir la ruptura de las Trompas de Falopio, que puede generar consecuencias severas como hemorragias e incluso poner en peligro la vida de la mujer, es necesario el diagnóstico y el tratamiento precoz.
Los síntomas no suelen ser los mismos en todas las pacientes, e incluso puede variar de acuerdo a la etapa del embarazo en la que esté. En cualquier caso, si la mujer presenta alguno de los siguientes síntomas se recomienda la consulta médica de manera inmediata:
- Dolores o sensibilidad en el abdomen o la pelvis. Este dolor puede presentarse de manera repentina, ser persistentes e intensos o incluso ser suaves e intermitentes en un principio. En general estas molestias pueden ser percibidas de un solo lado del abdomen e incluso estar acompañados de náuseas y vómitos, e intensificarse con el movimiento o la actividad.
- Pérdidas de sangre o hemorragias vaginales. En muchas ocasiones, este síntoma puede ser confundido con una menstruación leve, ya que la sangre puede verse roja o marrón como el color de la sangre seca y puede ser continua o intermitente, espesa o ligera.
- Dolor de hombros. Este dolor aunque parezca no estar relacionado con un embarazo ectópico, si se expresa especialmente en estado de reposo suele ser una advertencia típica de un embarazo extrauterino con ruptura de trompa y es esencial obtener asistencia médica de inmediato. Esto es provocado por la hemorragia interna, que irrita los nervios que se dirigen hacia esa área del cuerpo.
- Si se produjo la ruptura de una trompa de Falopio, también puede presentarse signos de shock, como pulso débil, acelerado, piel pálida sudorosa, y mareos o desmayos.
