Algunas veces nos damos cuenta que los dientes de leche de nuestros niños pequeños se ven amarillentos y no sabemos por qué. La razón principal por la que se vean de este color, o hasta que parecen de color naranja, es porque no han sido limpiados de una forma cuidadosa durante mucho tiempo y han desarrollado encima una capa de placa que ha sido teñida por los residuos de la comida.
Usualmente es posible remover estas manchas lavando los dientes de tu hijo a conciencia con un poco de crema dental para adultos, que tiene más poder de limpieza que la de los niños, o con un poco de bicarbonato de sodio y agua. Si esto no funciona, tu dentista puede hacer que estas manchas desaparezcan con un cepillado profesional. Debes saber que estas manchas no significan que los dientes de tu hijo tienen caries, pero dejar esta placa acumulada en los dientes puede causar gingivitis.
Si las manchas que ves en sus dientes son más oscuras, esto se puede deber al hierro en sus suplementos vitamínicos y si tu hijo es propenso a desarrollar diferentes clases de manchas en sus dientes, lo mejor es que siempre estés pendiente de su rutina de limpieza, haciendo que se cepille regularmente y de una de una forma muy buena. Porque una vez estas manchas han permanecido mucho tiempo en los dientes, son muy difíciles de quitar, incluso por el dentista.
Los dientes infantiles o de leche, también se pueden manchar o decolorar si han resultado lesionados por una caída o un golpe. Estas manchas normalmente están en la parte interior del diente y no pueden ser limpiadas. Y si tu hijo tiene fiebres altas recurrentes, ha tenido exceso de fluoruro durante largos periodos como bebé o niño más grande o tiene una enfermedad crónica, sus dientes de leche podrían no estar afectados, pero si los de adulto que están por salir.
