Los chicos entre los dos y los cuatro años tienen energía de sobra. Y eso es algo bueno en término de desarrollo físico, porque es el movimiento repetido de los grupos musculares grandes y pequeños lo que refina el funcionamiento de estas partes del cuerpo. Las habilidades motoras gruesas se desarrollan primero, y eso explica porque los niños en esas edades tienden a correr más, saltar más y moverse más, de lo que harían para desarrollar sus músculos más pequeños, como por ejemplo pintando o manipulando juguetes pequeños.
Todo es igualmente importante y por eso te traigo algunas actividades que aumentan el desarrollo físico de tus hijos.
– Toma caminatas familiares: Alterna el caminar, el correr, el trotar y marchar. Puedes jugar con ellos a las escondidas o iniciar una colección de plumas u hojas de árboles como diversión mientras caminan. Si quieres quedarte en casa, puedes organizar un desfile de instrumentos musicales o de banderas.
– Juega con agua en el patio: Una piscina pequeña, un rociador o una manguera pueden ser perfectos para jugar a mojarse, para correr y para tener contacto. No olvides siempre supervisar a tu hijo cuando se esté jugando con agua.
– Juega a fingir: Hacer de animales es uno de los juegos favoritos de los niños. En este juego le puedes decir que galope como un caballo, que haga como un perito o que camine como una gallina. También puedes decirle a tu hijo que pretenda que vuela por el salón o que reme en su habitación.
– Baila al ritmo de la música: Ponle a tu hijo diferentes clases y estilos de música. También el tocar instrumentos musicales aumenta el desarrollo físico. Otra cosa que puedes hacer es poner de esas canciones que mezclan la música con movimientos físicos, como aquellas que tratan sobre los animales o que tienen bailes.
Foto: basykes.
