Sabemos que como madres no nos gusta ver llorar a nuestro bebé y acudimos tan pronto podemos para asistir en ese tipo situaciones, pero lo cierto es que muchas veces, estos sollozos responden a una manera muy natural de liberar tensiones y estados de estrés que el pequeño bebé acumulando.
Biológica y neurológicamente nuestro cuerpo desde que nace está capacitado para liberarse de situaciones tensas, y esto sucede a través de las lágrimas, que mágicamente recuperan nuestro estado emocional y químico en el cuerpo.
Si tenemos presente que son muchos los factores de excitación que se presentan a lo largo del día en un bebé y que su sistema nervios aún esta inmaduro y es muy sensible a cualquier tipo de estímulo, esta manera de liberarse puede llegar a verse como la más natural.
El niño puede responder de dos maneras para afrontar todos los estímulos que ingresan hacia sí desde el exterior, una descansar y dormir, y la otra es romper en llanto. Cuando duerme se aisla por completo de cualquier estímulo, y por el contrario cuando llora se descarga de este tipo de excesos.
Por eso madres, es muy importante que sepas reconocer los estados de vuestro hijo, y que tengas presente que el llanto muchas veces es natural, sobre todo en determinadas situaciones, por lo que te recomendamos que con mucho amor y cariño, trates de calmarlo, haciéndolo sentir cómodo y protegido, y así colaborarás para que elimine sus estados de estrés emocional, físico o mental.
Foto: Gracias a memekode