Los bebés son criaturas extraordinarias porque pueden dormir incluso cuando el teléfono está sonando y el perro está ladrando al mismo tiempo.
Esto es muy normal y no indica de ninguna manera que tu bebé tiene problemas de audición, sino que quiere seguir durmiendo.
Por eso es mejor probar la audición de tu bebé cuando está despierto y alerta.
Algunas cosas que puede hacer para examinar la audición de tu bebé son:
- Si tu bebé tiene menos tres meses, aplaude detrás de su cabeza. Si se sobresalta, todo está bien. Si no, repite la prueba varias veces antes de preocuparte.
- Si tu bebé es un poco mayor, entre los cuatro y los seis meses, ya debe tener control sobre su cabeza. Así que dile su nombre para que veas si voltea a mirarte o reacciona a tu voz. También podría mover los ojos o la cabeza para intentar ver la fuente de algún sonido interesante.
- Entre los seis y diez meses, tu bebé debe responder a su nombre y a los sonidos familiares del ambiente, como son el sonido del teléfono o el ruido que hace la aspiradora.
- Entre los diez y quince meses, debe ser capaz de señalar un objeto familiar cuando le dices el nombre de este.
Si no tienes respuesta en alguna estas pruebas, debes consultar a tu pediatra. Teniendo en cuenta que la gran mayoría de los bebés tienen una audición excelente, es posible que sea una pérdida temporal causada por un resfriado. O simplemente puede estar muy concentrado en su mundo para darse cuenta de tus intentos de distraerlo.
Foto: Gracias a Tammra