Cuando nos encontramos frente a un pequeño que se muestra hostil frente a sus progenitores, es importante que realicemos una consulta profesional para poder ayudarlo, y no caer en la característica actitud de padres, que piensan que ocultando el problema, estarán protegiendo a su hijo.
Por lo general, el profesional realizará una evaluación absoluta del comportamiento del niño, para diagnosticar el síndrome de niño rey, en la cual pueden estar presentes las siguientes características.
- Presenta cierta incapacidad para demostrar sus emociones, sobre todo empatía, compasión, amor, y son muy inteligentes para simularlas.
- Por lo general se comportan mal, y no sienten arrepentimiento por aquello que saben que está mal, y lo hacen reiteradas veces sin importarles nada.
- No toman la experiencia de error / castigo, como un método de aprendizaje.
- Mienten constantemente, es cruel con toda su familia y sus entornos, presenta rabietas todo el tiempo, se muestra caprichoso, y tiene un gran arte de manipular a todo el mundo para poder salirse con la suya.
Tiene poca tolerancia frente a sus frustraciones, y no se hace responsable de sus actos, le gusta romper las reglas y no respetarlas, y se muestra agresivo con aquellos que quieren imponer respeto y reglas de convivencia, para conseguir lo que quiere, insulta, pega, rompe cosas, escupe, y no se integra a los grupos de sus pares, ya que siempre está constantemente buscando sobresalir y llamar la atención.
Por estas razones, es necesario que los padres prestemos mucha atención frente a éste tipo de comportamientos y no dudemos en solicitar ayuda.