Algunas madres que tienen que trabajar muchas horas fuera de casa y encuentran la solución del cuidado de sus pequeños en una guardería o jardines maternales de infantes, muchas veces se preguntan si están haciendo lo correcto, si allí en ese lugar sabrán cuales son las necesidades alimentarias correctas para el crecimiento y desarrollo de sus pequeños.
Bueno, en la mayoría de los establecimientos educativos donde se ofrece el servicio de alimentación para los niños, el mismo tiene estrictas normas dietéticas que le aseguren a los pequeños el aporte adecuado de nutrientes acorde a sus edades. Si bien difieren los menúes de un establecimiento al otro, hay personal capacitado que se ocupa de realizar los mismos, para que a los niños no les falte absolutamente nada.
Los mismos antes de ser confeccionados son controlados por profesionales nutricionistas y pediatras, que brindan una absoluta seguridad en la calidad alimentaria tanto para los niños como para que sus padres estén tranquilos. Por otro lado hay organismos que controlan minuciosamente la calidad de los alimentos con los que se elaboran los platos, la higiene en el proceso de elaboración de las comidas, y la manera en la que se manipulan.
Lo más seguro en estos casos, es que se pida el menú que consumen los niños que realizan una comida en el jardín, cuando comienzan las clases, consultar con los docentes si el niño los recibe y come adecuadamente, y luego complementar esos menúes con la alimentación que le brindamos en casa.
