Muchas madres nos hemos preguntado muchas veces si las zapatillas o su mal uso pueden deformarle los pies a nuestros pequeños.
La respuesta es que si el calzado es de buena calidad, es probable que no provoque deformaciones, ya que el material suele ser blando y flexible para que el pie pueda moverse correctamente dentro del mismos y de esta manera se eviten lesiones.
Además hay muchos modelos que vienen con plantillas anatómicas que se adaptan a la forma de la planta del pie. Lo único que recalcaremos a tener en cuenta en cuanto al calzado deportivo, es que generalmente tiene mucho plástico y goma, lo que no permite la correcta transpiración del pie provocando una sudoración excesiva que propicia la aparición debida a tanta humedad de infecciones causadas por hongos.
Tengamos presente que la ventilación y la higiene son muy importantes, es por ello que aconsejamos siempre que al momento de colocarle el calzado a su niño, si este no contuviera una correcta ventilación, utilice medias de tejidos naturales, como el algodón, y así mismo, no tener un solo par de calzado para poder intercambiarlo y alternarlo con los otros.
Foto: Gracias a Elizabeth/Table4Five